Sr. Duro. Es el jefe. Ha llegado a su posición doblando esquinas y voluntades. Sus rasgos se han ensanchado y desdibujado por el prolongado ejercicio de la autocomplacencia y su mentón asciende al mismo tiempo que su poder. Siempre le acompaña una sombra sobre su cabeza que nadie sabe a ciencia cierta si representa la duda o la conciencia. Como no podía ser de otra forma, desconoce la existencia del arte.
13 DICIEMBRE 2004
© 1987 pepe fuentes