Estamos en otra isla, sólo que 19 años después. Han cambiado algunas cosas en mi vida: ahora sí consigo alejarme un poco más de mi mismo que en mis viejos viajes, pero la mirada es la misma y la cámara también. Ambos tenemos rozaduras y estamos un poco más desgastados, pero seguimos compenetrándonos y fotografiando en equipo. Por ejemplo, estas caras que parecía asomaban desde tiempo inmemorial, la cámara las fotografió de mala gana. Sin embargo, disfrutamos mucho los dos las que hicimos poco después y que aparecerán los próximos días.
24 MAYO 2005
© 2003 pepe fuentes