Cuestiones de identidad: hay una determinada identidad que nos viene dada. Circunstancial y superficial porque se conecta con las formas y convenciones que ya estaban aquí (las que nos mantienen entretenidos y a veces molestos). Hay otra: la que nosotros mismos conformamos a partir de la formulación de preguntas y respuestas, y esa es la esencial, la que se nos introduce en la medula. Estará indirectamente sujeta a las convenciones circunstanciales, aunque dependerá del grado de independencia del individuo, porque el ser individual -si está vivo- por el mero hecho de ser, tenderá a que prevalezcan sus rasgos personales sobre los colectivos.
4 JULIO 2006
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