Empecé este mes con Bierce y también lo terminaré con su Diccionario del diablo:
DESENCANTAR. Liberar el alma de las cadenas de la ilusión para que el látigo de la verdad pueda hacerla sangrar en más lugares.
A medida que me iba adentrando en los días notaba que el desaliento crecía; menos mal que los pinchazos del malestar no me provocaron hemorragias porque los trato con una mezcla, a partes iguales, de indiferencia, sentido común (viene a ser lo mismo), olvido y aburridas excursiones al campo.