El autor de esta escultura hiperrealista tiene mucho éxito en Arco todos los años. Es un artista espectáculo. Como García Alix en fotografía, que no me sorprendió; la galería mostraba más de lo mismo: torsos desnudos, tatuajes, sexos femeninos al aire y miradas desaforadas (de él). Pensé que quizá este famoso fotógrafo esté un poco cansado. Aunque miré lo suyo con la sensación de que ya lo había visto, reconozco y admiro su talento: en sus fotografías hay vida arrancada a tiras de su coraje y de su coherencia artística y existencial (esto último sólo lo supongo porque no le conozco). Estimable. Yo también estoy cansado, aunque a mí, al menos, todavía me queda la fase de los tatuajes ¡tan fotográficos! La mirada la ensayo un rato todos los días.
«Cada año me pesan más las cámaras, y cuantas más fotos tiro, más todavía. Son de granito. Hay que estar muy fuerte psicológicamente». García Alix.