Nunca sé del todo como van a reaccionar los tonos
al secarse.
Son tan sensibles como los distintos tonos de piel
al contacto con el sol.
Delicados tonos grises que se convierten
en sucios, pesados,
y así no sirven.
Blancos inmaculados que se oscurecen
hasta la sordidez.
Bajos tonos en el umbral del misterio
que se traducen en vulgares negros
sin matices ni remedio.
30 MAYO 2008
© 2008 pepe fuentes