Tuve que pasar unas pruebas sencillas y contestar a unas preguntas, también fáciles, negué todo, naturalmente (por si acaso). El resultado fue positivo: prueba superada. Puedo seguir conduciendo coches, que es lo único que todavía me atrevo a conducir (despacio). Luego, ya que estaba en la calle, me he animado a callejear un rato, pero con desgana.
8 JUNIO 2008
© 2007 pepe fuentes