Estas dos mujeres son algunas de las que
fotografié aquella tarde.
Después de nueve días de hombres solos
y nueve de mujeres solas,
ahora,
desde el otro día y hasta
final de mes:
parejas;
ocho de hombres
y ésta, de mujeres.
En este asunto de la reivindicación gay
siempre se hacen más presentes
los hombres y no sé por qué.
Quizá porque lo tienen más
difícil.
Yo sé poco de todo eso,
posiblemente porque no consigo tener una
–idea del mundo en la cabeza–
(según Rafael Chirbes, para hacer algo bien hecho,
tienes que tener una idea del mundo en la cabeza).
Creo que no le leeré más,
porque yo, idea,
ni siquiera del mío.