Nos sentamos en la escalinata de un majestuoso y bellísimo templo a observar a la gente y sus movimientos. Existe un momento clave en el discurrir de los grupos que se mueven bajo una misma dirección (me refiero al jefe del grupo, también llamado guía turístico) y es cuando éste se para, levanta una bandera, paraguas o cualquier otro objeto y reclama la atención de todos. Una vez que los tiene reunidos en torno suyo, les da una charla sobre lo que les muestra, incorporando datos históricos, artísticos, utilidad a lo largo del tiempo del monumento u objeto, de indudable y gran valor. Es enternecedor y chocante verles a todos mirando hacia el mismo sitio al unísono. Unos instantes para fotografiar y luego siguen caminando hasta el siguiente y así hasta el final del programa del día y de todos los días.
4 NOVIEMBRE 2008
© 2008 pepe fuentes