23 JULIO 2009

© 2009 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2009
Localizacion
Aranjuez, (España)
Copiado máximo en soporte baritado
3
Fecha de diario
2009-07-23
Referencia
3611

Esa mañana, en los paseos umbrosos, me encontré con los siguientes tipos de gente: hombres mayores, aparentemente jubilados, que paseaban en pequeños grupos; familias con niños pequeños; niños no tan pequeños, sin familia pero con profesores; hombres, también mayores, que paseaban en cochecitos a bebés (debían ser abuelos jubilados, útiles a las causas familiares); un grupo de mujeres en la cuarentena aparentemente aficionadas a la botánica, porque miraban alternativamente a los árboles y una especie de manual que llevaban todas. Discutían acaloradamente sobre la forma de las hojas y cosas parecidas. Supongo que cuando hacían coincidir el árbol y la fotografía o descripción del libro se sentirían muy felices (a mi me pasaría lo mismo). También pululaban los repetidos corredores de fondo ensimismados, con la mirada pérdida y la cara desencajada, generalmente de mediana edad, luego firmes candidatos a la parada cardiaca. Pero, entre todas las tipologías de paseantes que me encontré, quién más me interesó fue una pareja (hombre y mujer) de unos cuarenta años, ambos con ropa convencional de empleados en horario de trabajo: él con traje y corbata y ella con atuendo también muy formal, que se besaban arrebatadamente cada dos pasos (y eran las once y media de la mañana). No quería pensar mal (o bien, depende de cómo se mire), pero componían una imagen típica de amantes en pleno y apasionado absentismo laboral. Son los que se ven en la imagen, caminando de la mano por el paseo en claroscuro.

Pepe Fuentes ·