…Otro de los títulos que se me han aparecido, y espero que haya sido una gracia de mi deseada -inspiración-, aunque eso nunca se sabe, es -El deseo del misterio-. Desde que tuve una cámara entre las manos, lo busqué como sentido y sustancia para mis fotografías. Siempre que me preguntaban sobre mi interés fotográfico repetía, solemne, lo del «misterio«. Me dejaba satisfecho. Me sentía muy artista con ese insondable empeño. Pero claro, no era más que una ingenua bobada, porque no sabía exactamente lo que era el misterio. Ahora tampoco, pero ya nadie me pregunta. Es un alivio. «¿El misterio de las cosas? ¡Qué sé yo del misterio!» Fernando Pessoa. Quizá todo sea una falacia. No sé. Lo que sí sé es que siento su respiración agitada, viva e imperiosa dentro de mí. He buscado argumentos, teorías, citas (de otros, naturalmente), podría incorporar algunas, pero me parece que no hay explicación para la percepción del misterio. Es tan personal e intransferible como la mirada o el deseo. Pero como a mí me gustan mucho las citas, no me resistiré a pegar una aquí, muy cercana a lo que intuyo sobre el inabarcable misterio: «No tengo idea del misterio, sólo tengo un sentimiento de él. Me hace falta inspiración para evocar el misterio (y no para expresar el sentimiento que de él pudiera tener). Tal inspiración consiste en unir en una imagen lo que el mundo ofrece de visible, de tal modo que evoque el misterio». René Magritte.
3 DICIEMBRE 2010
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