…El Fotógrafo quiere volverse loco, ardientemente. No tiene otro remedio. La locura es el único estado que podría salvarlo, pero aún está muy lejos de esa riente perfección. En algún momento puede que lo consiga, porque los sutiles
e incomprensibles intervalos de tiempo que busca en escenarios imposibles,
entrando por puertas rotas, no los entiende, y eso ya es algo…
26 ABRIL 2012
© 2012 pepe fuentes