…Florentino, se había quedado desnudo, ya sólo era un tallo escueto, casi seco, sin ningún aditamento con el que protegerse, solo le quedaba el flácido estambre. Pero claro, sin los ornamentales pétalos qué podría hacer con él. Nada. Sólo esperar el infausto final…
16 JUNIO 2012
© 2012 pepe fuentes