…Pobre Modesto, el inconsciente Exhibicionista, porque si no sentía el supuesto calor del público, o el aplauso que merecía su supuesto talento, se marchitaba y frustraba y, a pesar de que
a nadie importaba, él seguía y seguía con la vana ilusión de ser visible para los demás…
25 JUNIO 2012
© 2012 pepe fuentes