AMOR SILUETEADO A LA LUZ DE
LA LÁMPARA
El brazo de humo, adelgazado, se extiende
hasta la otra orilla del agua y se posa brevemente sobre una
pequeña casa cerca
del bosque. Un hombre y su esposa, cada uno con su copa en la mano,
están sentados
dentro, discrepando sobre quién de los dos morirá primero.
«Yo» dice el hombre.
No, «yo» dice la esposa. «Tal vez muramos al mismo tiempo»,
dicen al unísono.
No pueden creer que estén hablando de esta forma.
Entonces la esposa se levanta
y dice, «Si fuera una artista, pintaría tu retrato»… Mark Strand
20 AGOSTO 2012
© 1998 pepe fuentes