…Antes de que pueda asentarse una nueva tecnología vendrá otra a sustituirla y la fotografía estará condenada a no tener paz, a ser un alocado lenguaje a la búsqueda incesante de su razón de ser. La supuesta realidad estará siempre ahí, los que fotografíen también, el mundo, la luz, las gentes, todo en definitiva, pero el soporte y la identidad del lenguaje no tendrá ni un momento de sosiego, tan necesario para que el artífice pueda pensar despacio sobre sí mismo y su mirada…
26 SEPTIEMBRE 2013
© 2013 pepe fuentes