22 ABRIL 2015

…pepe y las citas VII: He decidido que este bloque de citas  (hasta final de mes) sean dos por autor. No sé por qué, de pronto se me ha ocurrido. Reflexiones o visiones estereofónicas, duales. No así las imágenes, que serán en mono. Solas. No sé si acertaré en las asociaciones de geniales reflexiones de apreciadísimos autores con mis imágenes sin propósito, pero eso sí áureas. Algo es algo. Iremos viendo. Hoy toca Ricardo Menéndez Salmón, felicísimo y reciente encuentro de un autor que me deparará muchos momentos felices. Seguro.«En realidad, como cualquier ser humano, necesito de un conjunto más o menos abigarrado de creencias a las que sentirme atado como un bote a su pantalán. Hay quien se vincula a un dios con cara de viejo terrible; otros lo hacen al intangible murmullo del patrón oro. Yo, a fecha de hoy, me refugio en el afecto de mi mujer y en ciertos libros». A mí me pasa lo mismo. Y otra esencial: «La verdadera maldición de la vida no es el trabajo, sino el sinsentido de la existencia, ni siquiera el dolor o la enfermedad: la verdadera maldición de la vida es el tedio. Sólo quien vence el tedio ha vivido, sólo quien es capaz de hacer algo distinto a matar el tiempo merece decir «he vivido». Esta encierra una inquietud diaria que sobrellevo en silencio: -a pesar de que el dolor y la enfermedad me están dejando en paz y he dispuesto algunas defensas contra el tedio, no consigo poder afirmar –he vivido– que dice Menéndez. Quizá sea porque no tengo claro que lo que hago no sea solo -matar el tiempo- sin sustancia ni provecho.