…De cualquier modo, El Mural de los Noventa es, esencialmente, una obra fotográfica construida con noventa rostros. Formalmente solo es fotografía, juego estético, plástico, especialmente expresivo. Alimentaré el sueño de que se parezca a una obra artística y con eso bastará, porque ya se sabe, para que una obra alcance esa categoría necesita que alguien que pueda lo diga, y esa persona, en el caso de que existiera, no pertenece ni pertenecerá a mi mundo. No importa porque lo fundamental es que El Mural de los Noventa cuelga en una pared de mi casa que parece estar diseñada para que dieciocho años después de que fuera construida lo acogiera. A veces, asombrosamente, las piezas encajan en el tiempo con un sentido que va más allá de toda lógica o previsión; mágicamente…
6 JUNIO 2015
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