6 JUNIO 2016

© 2013 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2013
Localizacion
Corral de Almaguer (España)
Soporte de imagen
-120 MM.- ACROS 100
Soporte de copias
ILFORD MULTIGRADO WARMTONE BARITADO
Viraje
SELENIO
Tamaño
18 x 22,7 cm
Copiado máximo en soporte baritado
3
Año de copiado
2014
Fecha de diario
2016-06-06
Referencia
6791

Y TRES AÑOS DESPUÉS VOLVÍ A «LOS CANUTOS» (y todo estaba más estropeado, yo también). Me acerqué el diecisiete de mayo, con Charlie Brown, claro. Vamos a todas partes juntos, aunque luego cada uno hace sus cosas. El lugar está a cien kilómetros de mi casa, en plena Mancha o casi. Son tres enclaves bajo tierra, en un campo de labor solitario, aunque pulcramente labrado y con viñas cerca. En el primero al que llegué no fotografié, estaba completamente devastado. Destruido. En el segundo, donde hace tres años realicé algunas fotos estimables, o que a mí al menos me gustaron, ni siquiera pude pasar porque habían colocado una fuerte puerta de hierro que impedía la entrada. Di una vuelta alrededor del pequeño montículo bajo el cual se encontraban las cuevas y, a pesar de tener varias aberturas, por ninguna se podía penetrar en el interior. Por una ventana pude ver que la habían destinado a guardar materiales agrícolas. Un desperdicio, una catástrofe para mi «arte fotográfico», luego para el mundo, aunque no lo sepa nunca. Y más adelante, el tercero, Los Canutos, donde también fotografié bastante. Se podía acceder pero el escenario que entonces me resultó interesante y conveniente para mis absurdas figuraciones, estaba muy deteriorado y no era posible recomponer el halo de misterio y sugestión que tuvo. El caso es que lo intenté, ya que había viajado desde tan lejos. Pasé unas horas esforzándome, afortunadamente sin que apareciera el comando de guardias a impedirme que desplegara mi talento «creativo», que es lo que suelen hacer en estos casos. Mientras que me dedicaba a recrear variantes de fotografías realizadas allí, El Chuchi iba y venía alocado y muy contento (se esforzó tanto en lo suyo que luego pasó dos días dolorido y sin apenas moverse, por agotamiento). Bueno, el caso es que muy probablemente estuvo bien volver a un mágico lugar al que no regresaré nunca.    

Pepe Fuentes ·