…Y siguiendo la pista de los callados signos de tiempos remotos, hacia la que siempre me siento fuertemente atraído, uno de los días buscamos obstinadamente un escenario que evocaba el mito más que la historia. Después de que nuestra torpeza nos hiciera deambular durante horas por carreteras que no nos llevaban a ninguna parte dimos con el enclave. No sé si el espíritu del mítico rey Decébalo y sus feroces guerreros dacios aún continuaba allí pero, ya que habíamos conseguido llegar desde tan lejos, había que fotografiar. Eso hicimos…
7 SEPTIEMBRE 2016
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