DIGRESIÓN UNA.- Lilting, Reino Unido (2014). Guión y dirección: Hong Khaou. Intérpretes: Ben Whishaw, Cheng Pei-Pei. Anndrew Leung, Peter Bowles, Naomi Christie. Bellísima historia de amor entre dos hombres jóvenes. También lo es de generosidad y entrega. Y de estilo irreprochable a la hora de afrontar sentidas tragedias. Estética y ambientalmente se mueve en unas coordenadas cuidadas, pulcras e irreprochables. Las interpretaciones estás ajustadísimas al tono que Hong Khaou da a la historia. Es asombrosa la madurez y generosa grandeza del personaje de Richard (Ben Whishaw), además de su excelente interpretación. En cuanto a la protagonista femenina, Junn (Cheng Pei-Pei) la madre de Kai (Anndrew Leung), realiza un trabajo exigente. Mujer dura, fría, inflexible. Es fácil pensar de un personaje como el suyo, así como de la inquebrantable voluntad y rasgos de carácter defensivo a ultranza que adopta, que son excelentes mecanismos de protección frente al mundo, pero provocan un ambiente irrespirable a su alrededor. Las gentes que prefieren (o preferimos) esa solución consiguen crearse estúpidos y angostos cubículos donde se guarecen y de los que se niegan a salir. Ahí languidecen y mueren. Película intimista, sutil y delicada que se deja ver con una sensación ambivalente: entre la media sonrisa admirativa y la tristeza.