LA CIUDAD MELANCÓLICA X (o donde habitan los dioses de la paz eterna). Había dejado de llover. Paramos frente a los crematorios situados en una superficie ligeramente elevada en relación al río. Se podía apreciar el reflejo de algunas hogueras vivas. Unos hombres las alimentaban con troncos y varias columnas de humo se hacían visibles en la distancia. Algunas personas miraban y otras se movían en el escenario, sin que supiéramos el propósito. En el río, mucha gente observaba desde barcas. La nuestra se situó detrás de muchas que había paradas y allí permanecimos un rato, mientras la tarde se apagaba rápidamente. No fotografié. Resultaba difícil comprender la ceremonia, el trance, tan natural entre esas gentes…
10 OCTUBRE 2017
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