LAS COSAS COTIDIANAS (que ni siquiera son cosas, solo inercias previsibles o imprevisibles, aunque siempre indeseables). Una de ellas, susceptible de ser contada, sin importancia apenas: mi ordenador se ha ido a la mierda, después de tan solo quince meses. Contacté con el servicio técnico (está en garantía) y, después de una larga espera y una breve conversación con un técnico, o al menos supuse que lo era, me dijo que había que hacer un chequeo del disco duro, o algo así, pero que probablemente habría que formatearlo. Le contesté que eso suponía un riesgo de pérdida de contenidos y que necesitaba tiempo para hacer copias de seguridad, aunque creía tenerlo todo salvado…
5 MARZO 2018
© 2016 pepe fuentes