2 JUNIO 2018

MI ÚLTIMO VIAJE A LISBOA. Día uno (27 abril, viernes). Salimos a la una y media, más o menos. Comimos en el camino, un menú de mierda en un restaurante de mierda, antes de llegar a la altura de Trujillo. Llegamos a las siete de la tarde. Después de pasar por el hotel, nos acercamos al centro. Un breve paseo por el Barrio Alto y cena en la cervecería Trindade. Luego, otro paseo por las calles paralelas donde abundan restaurantes y locales de copas. Tomamos una copa en Páginas Tantas, local de jazz en directo al que siempre vamos. En los primeros viajes que realicé a Lisboa, en los años ochenta, era un restaurante del mismo nombre. Estábamos de nuevo en Lisboa, nada menos, en el centro mismo de su ilustre y melancólico carácter. Antonio Tabucchi dice: “…ofrece una apreciable variedad de alternativas para un noble suicidio”.