2 OCTUBRE 2018

UN VIAJE LEJANO, nada menos que a China (2) … Llegamos muertos y dormidos después de tantas horas de vuelo y de arrastrarnos por aeropuertos, atravesar controles de seguridad aduaneros y todos esos incontables trámites insoportablemente molestos. En la aduana China nos retuvieron por el abultado equipaje fotográfico que llevaba y que ya nadie entiende. Nos llevaron a unas dependencias administrativas y me colocaron delante de las narices un cuestionario sobre mi estado de salud, en chino claro, porque supongo que pensaron que con ese equipo fotográfico no estaba bien de la cabeza. Después de unos minutos de desconcierto para ambas partes, nos permitieron salir. Debieron pensar que estaban haciendo el tonto, casi tanto como yo. Llegamos al hotel entre las ocho y las nueve por lo que no teníamos opción de ocupar la habitación del hotel contratado hasta las catorce horas, luego teníamos por delante cinco o seis horas para no hacer nada de provecho. Dejamos las maletas y salimos a dar una vuelta, justamente por esta calle peatonal, pero el cansancio y el calor nos hizo desistir media hora después. Nos refugiamos en el lobby del hotel en estado de shock. Una vez tuvimos la habitación dormimos por la tarde y luego, nada, otro paseo para comprobar el lujoso entorno comercial de la zona…