3 AGOSTO 2019

DIGRESIÓN DOS. La noche de los girasoles. España (2006). Guion y dirección: Jorge Sánchez-Cabezudo. Fotografía: Ángel Iguacel. Reparto: Carmelo Gómez, Judith Diakhate, Celso Burgallo, Manuel Morón, Mariano Alameda, Vicente Romero, Walter Vidarte, Cesáreo Estébanez, Rodolfo Sánchez-Cabezudo. Seca, fatal, creíble, oscura, perturbadora. Excelente película. La historia se desdobla en al menos cuatro momentos o escenarios terribles y, todos entrelazados, hacen del conjunto un mosaico de miserias y aciagas casualidades que, por verosímiles, contemplas con un estupor desalentador. Espléndido guion y una mejor puesta en escena. La España vacía, ahora tan traída y llevada, está ahí presente, cruel, trágica. Si tuviera que elegir alguna de las subtramas me quedaría con la relación entre los dos hombres viejos que viven solos en el pueblo semiabandonado (solo quedan ellos dos) en eterna y rencorosa pelea. Un odio inextinguible les alienta cada instante de sus amargados días (goyesco: los dos hombres que se golpean enterrados en la tierra). Espléndidos Vidarte y Estébanez en esos papeles. Pero, no solo es la constante tensión que despliega la trama y el preciso tempo narrativo sino, también, la textura y densidad dramática que transmiten las interpretaciones y una fotografía de tonos ocres y matices sombríos, como la historia en sí. Pero la sensación desolada no es solo por la tragedia en tiempo real, sino, además, porque es perfectamente visualizable desde la pavorosa perspectiva que tienen ante sí todos los personajes protagonistas. Película grande.