14 FEBRERO 2020

© 2011 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2011
Localizacion
Naty (Toledo)
Soporte de imagen
-120 MM- ROLLEI-INFRARROJA 400
Fecha de diario
2020-02-14
Referencia
4814

DIGRESIÓN SIETE. Storia di B. la scomparsa di mia madre (La desaparición de mi madre) Italia (2019). Guion y dirección: Beniamino Barrese (ficción documental).
Hagiografía laica de una sobresaliente oficiante del mundo de las apariencias y de la moda (sección modelo de pasarela) de hace unas pocas décadas, especialmente años sesenta y setenta, ahora ya jubilada, supongo. Las imágenes de sus esplendorosos momentos la muestran como una mujer bellísima y de potente personalidad. Hablo de Benedetta Barzini. Ahora dice, con setenta y seis años, que quiere desaparecer (no creo que lo haga, tal vez habla en sentido metafórico) y ese es el leitmotiv del que parte su hijo Beniamino para seguirla con su cámara por todos lados. Bendetta es extremadamente delgada, con el rostro marcado por profundos surcos, fuma incesantemente y hace gala de muy mala leche. En todo momento se muestra ante la cámara muy enfadada, como si el mundo le hubiera jugado una gran putada, empezando por su propio hijo y su cámara, que dice desear que se descomponga para siempre. Benedetta está en contra de muchas cosas, por ejemplo de la moda (el consabido discurso izquierdoso de la utilización fraudulenta e inmoral de recursos y personas para fines espurios, como por ejemplo ganar dinero); de las imágenes: “La mia persona non è fotografabile”, por la falsedad que contienen, aunque ella vivió toda su vida de ellas. Pero en lo que no cae o no dice es que si no fuera por las imágenes ella no habría existido como mujer singular (a su singularidad no renuncia). Parece que lo único que tiene sentido para ella es desaparecer y que se materialice como un juego de prestidigitación. Según dice: “ahora se encuentra en un momento de la vida en el que lo que desea es irse lejos, de todo y de todos, en busca de un lugar donde sentirse plenamente libre de espíritu, a sus anchas. Y quedarse allí, sin más”. Todavía ejerce de periodista y profesora de antropología de la moda en la universidad (no sé en cual, supongo que en Milán). Beniamino Barrese, la filma dando clases y es uno de los mejores momentos del documental: “¿Por qué nadie quiere aparentar ser viejo?”, pregunta a una joven alumna que, naturalmente, no contesta; es ella quien lo hace: “porque lo viejo se asocia a la idea de la muerte, y por lo mismo, todo el mundo quiere aparentar juventud, porque la juventud es equivalente a vida”. Una obviedad, pero que enunciada resulta inteligente y oportuna. El caso es que en la sencilla y lineal película (salvo por la inclusión de imágenes de archivo con algunos momentos de sus actuaciones estelares como modelo) Benedetta, omnipresente en pantalla, se pasa la mayor parte del tiempo soltando improperios al bueno de Beniamino, y al mundo en general. El hijo y su madre han eliminado radicalmente cualquier atisbo de sentido del humor, lo que hace que el documental tire a ladrillo con pretensiones existenciales y transcendentes.

Pepe Fuentes ·