DIGRESIÓN TRES. Richard Jewell. EE.UU. (2019). Guion: Billy Ray (Artículo: Marie Brenner). Dirección: Clint Eastwood. Intérpretes: Paul Walter Hauser, Sam Rockwell, Kathy Bates, Jon Hamm, Olivia Wilde, Wayne Duvall, Dexter Tillis, Desmond Phillips, Nina Ariana. Espléndida película de intriga o, si se prefiere, de reparación de injuriosos prejuicios. Mantiene un ritmo incesante, sin desfallecimientos. La trama, basada en hechos reales, es sumamente interesante dado que pone en evidencia algunas de las múltiples debilidades de los seres humanos: la enloquecida ansia de notoriedad, éxito y poder, la desidia, el mínimo esfuerzo, la dejadez en el desempeño profesional y los prejuicios clasistas. Detrás, y como protagonistas de la infamia, políticos tan solo preocupados de sus carreras, un estamento sumamente poderoso como el FBI instalado en la negligencia y un dudoso sentido ético, y los intereses espurios de unos medios de comunicación sensacionalistas más interesados en el escándalo que en la verdad (llegar primero a la portada del día siguiente). Y, como víctima propiciatoria, un hombre sencillo que tan solo pretendía hacer bien su trabajo, pero que tenía la imagen y la biografía equivocada. Eastwood, con estos elementos (hechos reales sucedidos en 1996) construye una trama que mezcla diversos géneros con absoluta naturalidad y con el marchamo de un clasicismo inagotable. Película plena de suspense, dinamismo narrativo e interés en los tipos humanos que encarnan a los protagonistas, especialmente Jewel, estupendamente interpretado por Paul Walter Hauser. Una vez más, Clint no ha fallado, todo lo contrario, nos ha ofrecido una soberbia historia. Un creador interminable.
6 JUNIO 2020
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