26 MARZO 2021

© 2021 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2021
Localizacion
Carrascosilla (Cuenca, España)
Soporte de imagen
-DIGITAL 160
Fecha de diario
2021-03-26
Referencia
8744

LOS MICROVIAJES: Entre Cuenca y Guadalajara (2)
Jueves, once de marzo de dos mil veintiuno.
…Bajamos de la zona a la que se llamaba calle de El Altillo, hacia la calle de Abajo. Nos acercamos a la casa aparentemente habitada. Del interior salió un hombre de avanzada edad, con el que charlamos un rato. Nos preguntó de dónde éramos. Se lo dijimos. Enseguida nos advirtió que la guardia civil acababa de pasar hacia pequeños pueblos que hay más arriba y que podrían multarnos por llevar suelto a Charlie. En realidad, nos estaba advirtiendo de que la zona estaba protegida y que ni se nos ocurriera hacer nada lesivo hacia él o el pueblo. Quedamos enterados. Nos contó algunas cosas: su edad (ochenta y cinco años); que iba todos los días desde Huete y pasaba todo el día allí, solo y feliz; que había nacido en el pueblo y siempre había vivido allí; que era propietario de tierras en la zona y que hacía años tuvo dos o tres gañanes, un pastor y un zagal; que cuando el pueblo se despobló, arrendó las tierras y se fue a vivir a Huete, en realidad, tan solo a dormir, porque vivir, realmente lo hace en Carrascosilla. Para que quedara patente su satisfactoria vida cotidiana, nos informó de que acababa de almorzar dos chorizos, que había asado en la lumbre (de ahí el humo que salía por la chimenea), y un vaso de vino. En un huerto cultivaba las verduras que necesitaba. También nos dijo que gozaba de una salud perfecta que le permitía comer de todo y que se mantenía fuerte y con ganas de vivir pero, eso sí, siempre y cuando pudiera ir a pasar todo el día allí, en cualquier época del año. No concebía alejarse del lugar que había sido su casa desde que nació. También nos dijo que no había votado nunca y que no lo haría. Al parecer, era una cuestión de pura coherencia, ya que no confiaba en los políticos. Entendí su postura.
La conversación empezó a decaer, no porque no hubiera muchos temas posibles sobre los que hablar, sino que, ni él ni nosotros, fuimos capaces de generar un mínimo de empatía mutua. Él desconfiaba de nosotros y se le notaba. Nos fuimos enseguida…
La fotografía: Ruinas y más ruinas. Mi interés era que pudiera haber alguna casa que se mantuviera en pie, con habitaciones aún reconocibles y texturas de pátinas polvorientas y, si había algún utensilio doméstico o muebles desvencijados, mucho mejor. Pero no, allí no había nada de eso. Solo lo que se ve en la fotografía.

Pepe Fuentes ·