LOS MICROVIAJES: Los Calatravos (4)
Viernes, veintiséis de marzo de dos mil veintiuno.
…Después de comer, en torno a las cuatro, emprendimos la marcha hacia Calatrava la Nueva, a pocos kilómetros de allí. Se trata de una descomunal fortaleza, situada en la cumbre del Cerro Alacranejo.
Desde abajo, en perspectiva, su enorme perímetro y altas murallas impresionan. Serpenteando por las empinadas cuestas llegamos a la puerta misma. Lo primero con lo que nos encontramos es que no podíamos visitarlo con nuestro embravecido, aunque pacífico, perrito. Decidimos dejarlo en el coche descansando de su tumultuosa experiencia en Calzada con los inconscientes y muy sociables calzadeños.
Nada más pagar nuestra entrada e iniciar la visita nos asombró la robustez y solidez de las murallas y la racional distribución de las distintas dependencias que se extendían por todo el recinto. Su origen se remonta a 1218, de estilo gótico cisterciense, construida, al parecer, con la ayuda de prisioneros musulmanes.
Hasta aquí la descripción básica del lugar, dado que no es objeto de este diario hacer las veces de guía turística (todo está en Internet y en publicaciones con verdadero fundamento).
El caso es que recorrimos encantados y con auténtica admiración el recinto, tanto por su belleza como por el inmenso paisaje manchego que se divisaba desde allí…
La Fotografía: Perspectiva de la fortaleza. No es sencillo encontrar imágenes que interpreten lo que ves y propongan lecturas en otro registro más allá de la mera y palpable objetividad. En este caso, tan solo aporto algún que otro retoque tonal ayudándome de la New Age fotográfica. Más allá, no llego…
9 ABRIL 2021
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