14 JULIO 2021

DIARIO DE ENVEJECIMIENTO TREINTA Y UNO, del tres de Julio de dos mil veintiuno (12:00 horas)
Mucho me temo que la última entrada del Mapa de los Días es bastante idiota; no hablo de nada que verdaderamente me importe y además me meto en un lío sociológico y de competencias municipales con las que nada tengo que ver. Ahora solo es tiempo de que me dedique, rapidito, a hacer las cosas que me importan y que todavía están sin hacer, porque tiempo ya queda poco. Lo que no haga mañana o pasado mañana quizá no lo haga nunca.
El día siete me dieron el resultado de una analítica bastante completa (quiero pensar): todos los parámetros están estupendamente, incluido el colesterol (el Zoster no entra en la analítica, ese va a su aire). El médico del seguro me ha leído los resultados; los tenía en la pantalla de su ordenador (supongo, porque yo no he podido verlos), luego tengo que confiar en que estuviera bien de la vista y que supiera interpretarlos. Ahora, en la seguridad social, no te dan un solo papel: ni informes, ni análisis, ni volantes, ni recetas, ni nada de nada. Deambulas por los centros de la sanidad pública a ciegas, y a veces a patadas. Según dicen los políticos (de izquierda), el sistema sanitario público es mejor que el privado, pero yo no me lo creo, ni mucho menos, al menos en el privado te lo dan todo por escrito porque dan por hecho que sabes leer. El día veintidós me harán una ecografía de la zona intestinal por lo de mi hernia (traeré al diario el diagnóstico, porque he acudido al sistema privado)…
La Fotografía: Primera de una serie de cuatro que realicé hace unos meses con la idea del dichoso envejecimiento en la cabeza. Las iré desplegando en días sucesivos porque, si no se ven secuencialmente, no tienen gracia…