DIARIO de las otras COSAS 26
Viernes, diecisiete de diciembre de dos mil veintiuno.
SOBRE FILOSOFÍA y 4…
“Acusar a los otros por nuestros fracasos es de ignorantes; no acusar más que a sí mismo es de hombres que comienzan a instruirse; y no acusar ni a sí mismo ni a los otros, es de un hombre ya instruido. (Enchyridion)” Epícteto
Grandísima reflexión filosófica sobre una verdad incontrovertible que constituye un principio esencial de la sabiduría humana. Yo estoy seguro, sin sombra de duda, que en el primer estadio no he estado nunca, ni siquiera de chiquitito; en el tercero tampoco, luego instruido no estoy, y sí en el segundo (no me queda otro); luego de aprendiz. Lo malo es que ya no me queda tiempo para llegar al tercero, porque en el segundo llevo toda mi vida. Tendría que comentar esta brillante idea de Epícteto con mi peluquero, por si tiene algo que aconsejarme.
Creo que voy a dejar de escribir por hoy. Son las siete de la tarde y quiero largarme del estudio a ver una peli.
La Fotografía: La pizarra: “Quiero cumplir mis metas…” escribió uno de los animosos muchachos que se acercaron a la pizarra a expresarse. Yo también lo quise antes, pero ya no. Ahora solo quiero ser feliz, pero no al estilo estoico de Arthur Schopenhauer, sino más bien al estilo de Homer Simpson, filósofo también, que tenía una gamberra e infinita capacidad para no aburrirse nunca. No sé. Ya veremos si lo consigo, a lo peor tampoco.