LAS SOLEMNIDADES XXIII
Jueves,16 de junio de 2022. Toledo. Ciudad Imperial.
(parcialmente nublado, pero caluroso)
…Los vestidos de rojo ya habían terminado su tarea de procesionarios elegantes,
al menos en la zona en la que yo me encontraba.
Los fotografié alejándose. Se les ve tremendamente distinguidos y hasta displicentes.
Yo, ni por lo más remoto aspiraría a desfilar con ellos; pero me encantaría probarme
una de sus estilosas y antiguas túnicas y fotografiarme.
Nada más.
Normalmente, en narraciones monotemáticas como la que estoy desplegando este mes,
suelo ayudarme de citas de autores relevantes y lúcidos
que den un poco de brillo a los textos y, sobre todo, que maquillen tanta insuficiencia por mi parte.
Así que ya va siendo hora de que meta algo de andamiaje intelectual que, naturalmente,
apoye mi visión del asunto:
“Al tomarse por lo que no son, al imaginarse en una configuración
diferente de la real, los hombres evitan lo trágico, es cierto,
pero pasan inadvertidos ante sí mismos.
No desprecio a los creyentes, no me parecen ni ridículos ni dignos de lástima,
pero me parece desolador que prefieran las ficciones
tranquilizadoras de los niños a las crueles certidumbres de los adultos.
Prefieren la fe que calma a la razón que intranquiliza, aún al precio de un
perpetuo infantilismo mental.
Son malabares metafísicos a un costo monstruoso.” Michel Onfray