5 FEBRERO 2023

© 2015 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2015
Localizacion
Toledo (España)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 3200
Fecha de diario
2023-02-05
Referencia
7728

ADENTRÁNDOME EN LAS TINIEBLAS XVI
Miércoles, uno de febrero de 2023

“Para la gente de mi edad ya no quedan sitios que hayamos amado de verdad y a los cuales hayamos pertenecido. Han dejado de existir los lugares de la infancia y de la juventud, los pueblos a los que íbamos de vacaciones, los parques con bancos incómodos en los que florecieron nuestros primeros amores, las antiguas ciudades, las cafeterías, las casas. Incluso cuando han conservado su aspecto exterior, visitarlas es aún más doloroso porque constituye una cáscara que ya no alberga nada. Yo no tengo adónde volver. Es como estar encarcelada”. Olga Tokarczuk
Empecé esta serie de seis días con una cita de Tokarczuk, hoy vuelvo a ella con otra de parecido tenor. Lúcida, pero irremediable.
No siento ese apego que suele ser tan universal. Quizá porque nunca me sentí un niño feliz. En algunos momentos he sentido algo de nostalgia en lugares de mi infancia, pero nunca la vibración de la emoción palpitante, y siempre ha sido hacia lugares físicos de los que habla Olga; pero nunca hacia las personas que poblaron mi infancia y adolescencia. Supongo que ese desapego emocional aligera de peso mi melancolía. Está bien así.
No quiero pasar por alto un aspecto que supongo importante en la vida de los viejos, que es el contacto con otros viejos (se dice que los viejos somos como niños), es decir el lado recreativo o entretenido de nuestras vidas, y sobre eso lo tengo claro, más que cualquier otra cosa: no quiero saber nada de decrepitas y tediosas pandillitas. Me parecen obscenas. Detesto las actitudes absurdamente positivas, proyectivas, sí, esas que se basan en el -no pasa nada, todo está bien, y nos vamos de excursión, tralarí, tralará-. Pues claro que pasa querido idiota, y ante lo que pasa, que es muy serio, solo cabe, en todo caso, un hedonismo consecuente y decidido, pero nunca la optimista estupidez.
La Fotografía: Creyente sexagenario (o septuagenario) cuatro. “Yo le reconocí que muy pocas cosas buenas se podían decir de la vejez y él dijo que sabía una y yo le pregunté cuál era. Y él dijo que no dura mucho. Esperé verle sonreír, pero no lo hizo. Vaya le dije, un comentario muy frío. Y él dijo que no era más frío que lo que los hechos requerían. Y ahí terminó la cosa.” (No es país para viejos). Cormac McCarthy

Pepe Fuentes ·