CENA RARA 9.2
“Que todos somos diferentes es un axioma de nuestra naturaleza. Sólo nos parecemos de lejos, en la medida, por tanto, de que no somos nosotros. La vida es, en fin, para los indefinidos; sólo pueden convivir quienes nunca se definen, y son nadie los unos para los otros”. Fernando Pessoa (El libro del desasosiego)
Sábado, veintidós de noviembre de dos mil veinticinco
… Poco después llegó una mujer delgada, Caroline, dijo llamarse, francesa y ostensiblemente joven.
Max, con una grosera falta de sutileza, lo primero que hizo fue preguntarle su edad; a lo que ella contestó que ni muerta se la diría. A lo sumo, lo único que podía decirle era que hasta hace nada tuvo 39. Más adelante supimos, por otras razones, que tan solo tenía diez más.
Simpática, amigable, delgada, de palidez nacarada y fisonomía afilada por delgadísimas líneas rectas: la boca, la nariz, los ojos y su rostro todo.
Me pregunté si me atraía o no y, aunque me gustan las mujeres delgadas, no era capaz de discernir hacia ella ni una cosa ni otra. Aparentemente sofisticada y cosmopolita: nacida en Normandía, había vivido en Londres y Hong Kong, también en Tailandia y había desarrollado varias profesiones; pero, después, me dio la impresión de que la más lucrativa había sido ser la esposa de un tipo de alto nivel económico (no lo dijo explícitamente, pero lo sobreentendí).
Vive en Madrid con sus tres hijas y su principal actividad y pasión es bailar bachata a diario, sin descanso. Cuando sus hijas se vayan a estudiar a Londres, tiene la intención de seguir en Madrid para seguir bailando furiosamente. Eso dijo.
Y en esto llegó otra mujer que puede que se llamara Alicia, no lo recuerdo bien, estuvo poco tiempo.
Esta, sin embargo, era de carnes blandas y aparentemente jugosas. Mullida para el abrazo. Acababa de rebasar la línea de la cincuentena. Dijo ser ingeniera de telecomunicaciones.
Había algo en esa mujer que denotaba muy mala leche y temblorosa crispación.
Miraba mal al tal Max (yo también, pero ella sin disimulo).
La Fotografía: Minuto quince: Caroline está situada a la izquierda y la recién llegada en el centro, justo delante del respaldo rojo de la silla.