Sentido del viaje: avanzar por paisajes que procuran gozo, alegría, plenitud y una cierta conformidad con la vida…
La soledad hambrienta devora las figuras. Sube el silencio contra el cielo, enorme, como un grande alarido.
Jose Angel Valente
Ha habido dos o tres viajes en que mi emoción se ha situado muy por encima de otros. Siempre ha sido en el momento de la partida, cuando la carretera se nos ofrecía para explorar otros territorios que presentíamos emocionantes. Muy especial fue el inicio de un viaje por Marruecos; a la salida de Tánger sentí una excitación y una alegría inmensa. Momentos inigualables.
Y sueño que juntos nos alejamos de Europa
nos hundimos en el polvo y el calor
de caminos donde somos extranjeros
«los» extranjeros, desconociendo
lengua, leyes
habiendo, por fin, olvidado.
José María Álvarez
Todo transmitía tranquilidad. La única agitación era la que tu pudieras llevar contigo.
Un pueblo del desierto del que no recuerdo el nombre, probablemente nunca lo supe.
Inscripción para la mayor gloria de algo o alguien, supongo.
EL LIBRO DEL TIEMPO.
Gozoso. Introducción: esta serie de fotografías tienen un denominador común: en el momento de realizar la toma sentía un estado de ánimo GOZOSO por el hecho de encontrarme con uno de «mis temas» y fotografiar. Esos momentos son magníficos, el tiempo desaparece como referente y es el discurrir de la luz, a lo sumo, lo que marca el «tempo». En esas ocasiones la acción de fotografiar me absorbe y me excita: encuadro, me acerco, me alejo y sé que haré una fotografía que siento, que disfruto desde el preciso instante en el que pulso el disparador y que luego me alimentará.
Por qué hay un geiser sulfuroso en una zona desértica de Bordj-Yerdi, en la carretera de Er-Rachidia a Erfud, en el sureste de Maruecos? No lo sé; lo que sí sé es que cuando lo vi me pareció mágico y disfruté al menos una hora fotografiando. Aparentemente puede parecer anecdótico, pero para mi este tipo de encuentros tienen un significado y una importancia que va más allá. Son prodigiosos en si mismos, por la conjunción de elementos que intervienen: la luz y su cualidad, el entorno, el encontrarme allí en ese momento, el hecho de fotografiar, el ser dueño de un tiempo que me es propio, que siento en las entrañas. Sólo es agua lanzada con fuerza hacia arriba, sí, pero es mucho más; es sentir que en ese instante todo tiene sentido y contiene un equilibrio perfecto. Son momentos GOZOSOS.