"El sexo sin amor es una experiencia vacía. Pero como experiencia vacía es una de las mejores". Woody Allen
…»El hombre sólo juega cuando es hombre en el pleno sentido de la palabra, y sólo es enteramente hombre cuando juega». Schiller. Este año pensé durante unos instantes en el tipo de imágenes que me gustaría conseguir. Cada vez pienso menos en eso. Sí, como es natural, a estas alturas de mi itinerario fotográfico, solo me interesan los retazos de algo que remitan, sugieran o cuenten historias posibles y esquinadas de la jodida realidad aparente que se presenta delante de las narices de casi todo el mundo y por supuesto de la mías. A mí qué me importa una predecible y sabida hasta el bostezo manifestación humana sobre cualquier cosa: NADA. Pues eso. Entonces? NADA: voy a la «fiesta» a oír acompasadas y ruidosas tamborradas y a hacer algunas fotografías que hablen de asuntos tangenciales a lo que allí sucede…A intentar jugar con la realidad, o más bien buscando a gentes que durante un rato, genial y valientemente, juegan una partida diferente a la de todos los demás…»El hombre, cuando es solamente lo que parece ser el hombre, casi no es nada». Antonio Porchia
Acabo el capítulo de los dúos, o del uno más uno. Los emparejados, sean gays o lesbianas (creo que es lo mismo, aunque no lo tengo claro), y los heterosexuales, por supuesto (porque somos más), siempre me han suscitado una inquieta reflexión, nada original por otra parte. A saber: una pareja puede ser el resultado de la suma de sus componentes, la mejor situación posible; o la resta, dicho de otro modo, cuando el uno neutraliza al otro reprimiéndolo hasta el sufrimiento más insoportable; y ese es el peor de los supuestos y, lamentablemente, demasiado frecuente (esto último sólo lo supongo). Cómo se llega a tan desolador desequilibrio es sencillo: por la correlación de poder y dependencia de los integrantes, el grado de inseguridad, el ejercicio de la convivencia viciada por la costumbre y, por supuesto, por la falta de inteligencia para estos menesteres de los integrantes. Si en una pareja alguno se siente reprimido, por respeto a sí mismo, lo que debería hacer es salir pitando antes de que sea demasiado tarde, porque no es fácil que el otro, o ambos, cambien nada. Me parece.
…Es sabido que a las magníficas y talentosas fotografías que hago, añado la escritura, afición en la que me temo no soy tan genial, porque me falta cultura literaria, talento y experiencia (y, por si fuera poco, tampoco he asistido nunca ni a un modesto curso de escritura o fotografía creativa). Pero bueno, al menos lo intento. En ambas actividades, tan artísticas, unas veces me salen bien las cosas y otras no tanto. Fotográficamente, la tarde del dos de julio, no tengo claro que mis propósitos (sobre todo porque casi no los tenía), me salieran bien del todo (una repentina e inexplicable veladura del ánimo me entorpeció un poco), y en cuanto a la escritura, creo que tampoco me está saliendo con brillantez. Pero, mientras que la fotografía es individual, personal e intransferible (por el visor de la cámara sólo puede mirar uno), en la escritura, cuando las palabras no fluyen alegremente, siempre puedes ayudarte de lo que han escrito otros: «¡Cuántas cosas son posibles aún! ¡Aprended pues a reíros de vosotros sin preocuparos de vosotros!» F. Nietzsche