“Ego te absolvo a pecatis tuis”
En aquel tiempo hacía fotografías como esta (formaba parte de la exposición motivo de la entrevista de la chica que ha tenido éxito), y está muy alejada de lo que hago ahora y de lo que podríamos llamar naturalismo fotográfico: imágenes creadas a partir de la mera observación de lo que nos vamos encontrando caminando o no; por cualquier sitio. Entonces se me ocurrían estas figuraciones sin propósito, al menos que pueda recordar, y que me siguen interesando. La diferencia estriba, creo, en que todavía consideraba la fotografía como «arte» que me salvaría de mi condena (entiéndase por arte, esa actividad humana que intenta, entre otras variantes, sorprender a los demás con una pretendida originalidad y además demostrar al mundo el inmenso talento y profundidad de espíritu del autor). Ya no creo que la fotografía sea un «arte«, al menos la mía, porque para mi, ahora, es otra cosa. Por otro lado, tal vez sea una estrategia perfecta para que el mundo la considere como tal (mi fotografía), dado que no hay nada como llevar la contraria.
Retrato «original»: en principio pensé que este cuadro era adecuado como fondo para fotografiar al pintor, y si le metía dentro de su cuadro, mejor, más original.
ALGUNOS DATOS AUTOBIOGRÁFICOS, ¿y a quién le importan? Ni lo sé, ni me importa que sólo me importe a mí. Hoy es el día mundial del trabajo. Por cierto: no sé si sólo es para los que trabajan por cuenta ajena o para todo el mundo. Fui trabajador por cuenta de otros desde Octubre de 1968 (tenía 15 años), hasta el último día de 2003: treinta y cinco años después. Qué recuerdo de tanto, tanto tiempo? NADA: sólo miserias y ridiculeces (por mi parte). Nunca hablo de lo vivido (o trabajado) a lo largo de tanto, tanto tiempo. Ellos (los patronos), nunca confiaron demasiado en mí, es más no confiaron nada, pero me pagaron escrupulosamente. Entonces, no entendía que no me señalaran para la gloria profesional (ascensos y esas cosas), porque me aplicaba. Ahora, lo entiendo perfectamente: yo no era un tipo «profesionalmente» fiable; ni siquiera sé por qué no me despidieron. En fin, todo aquel tiempo ruin pasó; ya no me acuerdo de casi nada y tampoco quiero hablar de lo que ocurrió a lo largo de tanto, tanto tiempo, porque ni a mi me interesa.
