El desdoblamiento fantasmal de los cuerpos ingrávidos…
«No hay que fijarse objetivos demasiado claros, así uno se asegura contra las derrotas». Kjell Askildsen. Me apasiona este escritor. Escribe poco y eso no es bueno para mí. Tampoco yo tengo objetivos claros y eso me ayuda a vivir. Me parece. Los pocos objetivos que se me colaron en el deseo, hace ya tiempo, me ocasionaron derrotas arrasadoras. Qué lástima. Ahora, hoy por ejemplo, me he enfrentado al hecho de escribir la presentación de esta serie, sin ansiedad, y después de dos horas sólo he llegado hasta esta palabra. Exactamente. No sé como continuar y tampoco el tiempo que me llevará terminar. Estoy tan difuso e impenetrable como los protagonistas de esta fotografía. Es una imagen de hombres desconocidos y apenas reconocibles que me remiten a una sensación de extrañeza. Son los otros, los desconocidos, los lejanos, los que resultan indescifrables; visibles, pero fuera, lejos de mi mundo. Les fotografié pero no tuve el deseo de conocerlos. Aunque anónimos y ajenos, su imagen permanecerá guardada en mi archivo para siempre. Han pasado a formar parte de mi vida. Apropiarme de la imagen de esos hombres supone asumir y compartir un momento, un instante existencial con ellos. El hecho de que aparentemente sólo sea su imagen -aparente-, sería una lectura simplista e ignorante, porque es mucho más, es la vida destilada en haluros de plata. Es la sustancia misma de la fotografía: captar situaciones, escenas y escenarios que vislumbren el alma de otros sitios, de otras gentes. Inquietante y emocionante. El título: -La extrañeza, los otros-
…Este mes me ha dado por André Bretón, de refilón; porque para dedicarme a alguien o algo de verdad tendría que saber mucho sobre él o ello. Por ejemplo, ahora me acuerdo de la irresistible contradicción de Breton (cuestión que a él no le preocupaba), de teorizar sobre el –automatismo psíquico– como generador creativo y adscribirse al marxismo, e incluso al Partido Comunista ¡que gracia! Menos mal que luego se largó de tan inhóspito escenario, aunque nunca se alejó demasiado de cierto dogmatismo. En fin, la naturaleza humana. De todas formas, Breton, es un inagotable creador de frases felices: «Fábrica de sueños baratos«, por ejemplo. A veces también ocurrentes como correspondería a la fotografía de hoy, que pretende ser FRÍVOLA, en contradicción con la de mañana,…