Yo estaba allí. Entraba mucha gente que se lanzaba entusiastamente a escribir mensajes amorosos. Que candorosa confianza.
1 SEPTIEMBRE 2004
© 2002 pepe fuentes
Yo estaba allí. Entraba mucha gente que se lanzaba entusiastamente a escribir mensajes amorosos. Que candorosa confianza.