Empiezan a llegar a la plaza hombres muy serios y estirados, vestidos de frac. Mantienen breves conversaciones con los de su clase y vestimenta y luego se retiran; supongo que al lugar de reunión de los hombres de frac. Un personaje, con aspecto de saurio, los va recibiendo; si les da un recado como «el presidente le está esperando en el bar» el hombre de frac recién llegado, sin duda de inferior rango, acelera el paso. Éste, que se muestra tan feliz con su móvil, venía de la plaza, o quizá de ver al presidente, o tal vez fuera el presidente mismo.
16 FEBRERO 2006
© 2005 pepe fuentes