FOTOGRAFIAS SOLAS. Introducción: Estoy algo cansado y al enfrentarme a la escritura de este mes percibo con claridad el lugar que ocupo: -me sustento en el aire viciado de mis obsesiones-. Existe un empeño, también una firme determinación, de no morirme todavía, pero el tiempo es corto y las soluciones imposibles. Los que seguís este diario sabéis que, cada vez con más frecuencia, cuento historias que voy mostrando a lo largo de varios días y, si recuerdo lo que dice Paul Auster: «En cierto sentido, la poesía es como tomar fotografías, mientras que la prosa es como filmar con una cámara cinematográfica», concluyo que mi afán no es ni una cosa ni otra; así que voy a experimentar este mes con historias de un día y a lo mejor me sale un libro de poemas (ojalá), porque a mí lo que realmente me hubiera gustado es ser poeta. Cuando escribo estas líneas no tengo ni idea de cómo voy a afrontar el relato fotográfico del mes; lo único que quiero es que las imágenes fluyan furiosas y solitarias, sin otras delante o detrás que las protejan. El colmo sería que además yo permaneciera callado, actitud para la que todavía no estoy preparado, pero no desespero, sin duda llegará.
«Nunca se es tan viejo como para perder la esperanza.» Kjell Askildsen