A lo largo del mucho tiempo que lleva fotografiando, lo ha hecho en diversas ciudades (espléndidas), pero sin atenerse a un plan concebido, seria y profundamente de acuerdo con sus ideales estéticos o filosóficos. No, que va; los viajes han sido en parte circunstanciales; aunque la elección de la ciudad haya respondido a coordenadas culturales y estéticas previamente elegidas. Luego, una vez allí, según me dice, la técnica consiste en deambular caprichosamente porque, piensa, que en cualquier momento aparecerá la fotografía que le estaba destinada. Es más, está convencido de que es así, porque los dioses de la fotografía y el azar le guían amorosamente. No. No es un individuo con inclinaciones esotéricas, sino que piensa que las localizaciones muy controladas no son garantía de nada. Los hados fotográficos pueden estar en cualquier parte. Por ejemplo en las calles, en cualquier calle de cualquier «espléndida y bella» ciudad, puede haber una fotografía fabulosa esperándole. Está Convencido. El Sabrá. Esta serie se titula: -Las fabulosas calles –
2 ENERO 2011
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