Félix Fèneòn (o los SUICIDADOS POR AMOR):
– Ácido nítrico mezclado con una buena dosis de láudano es el brebaje que engulló el señor Paul Malauzet, vecino de Montrouge, al enterarse de que su mujer lo engañaba.
– Alexandre Daubat, de cuarenta y ocho años, cantero en Villejuif, no podía consolarse de la marcha de su mujer. Se ahorcó en el jardín.
– Louis Tiratoïvsky hirió mortalmente en Aubervilliers a la señora Brécourt y se suicidó. El amor.
– Al saberse abandonado por su mujer, el señor Bassot, vecino de La Garenne-Colombes, trató de asfixiarse con carbón de leña. Está moribundo en Beaujon.
– El fotógrafo Jochim Berthoud no podía consolarse de la muerte de su esposa. Se mató en Fontenay-sous-Bois.
– Maltratado por el amor, el gendarme Léonce-Paul Isnard se ha ahorcado en la cocina del cuartel de Draguignan.
– El marinero Renaud se ha suicidado en Tolón con su querida. Su último deseo: el mismo ataúd o, al menos, la misma fosa.
–¡Mira, ya no voy a molestaros más! Dijo el señor Sormet, natural de Vicennes, a su mujer y al querido de esta, y se saltó la tapa de los sesos.
4 FEBRERO 2012
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