UNO de OCTUBRE: de pronto, previsiblemente, aparecieron las lluvias. Es una contrariedad, porque si persisten me impedirán algunos días de toma que tenía previstos antes de que aparezcan las crudezas invernales que tanto me condicionan. Llevo días pensando en volver a las cuevas de La Mancha. Me dejé algunas cosas por hacer. Ya veremos. Si vuelvo, lo cuento, seguro. Dependo del sol, de si aparece o no, porque los interiores, sin luminosidad fuera, quedarían planos, turbios, sin matices…
26 OCTUBRE 2013
© 2000 pepe fuentes