29 SEPTIEMBRE 2014

© 2014 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2014
Localizacion
Auschwitz, Polonia
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 3200
Soporte de copias
ILFORD MULTIGRADO BARITADO
Viraje
CLORURO DE ORO
Tamaño
15,8 x 20 cm
Copiado máximo en soporte baritado
1
Año de copiado
2015
Fecha de diario
2014-09-29
Referencia
7176

…»En el Lager la lucha por la supervivencia no tiene remisión porque cada uno está desesperadamente, ferozmente solo. Si uno vacila, no encontrará quien le eche una mano; encontrará más bien alguien que le eche a un lado, porque nadie está interesado en que uno más se arrastre cada día al trabajo; y si alguno, mediante un prodigio de salvaje paciencia y astucia, encuentre una nueva combinación para escurrirse del trabajo más duro, un nuevo arte que le rente unos gramos más de pan, tratará de mantenerla en secreto, y por ello será estimado y respetado, y le producirá un beneficio personal y exclusivo; será más fuerte, y será temido por ello, y quien es temido es, ipso facto, un candidato sobrevivir.
«Se negaban a dirigirnos la palabra, y sólo algunos, realmente muy pocos, se apiadaron de nosotros; con ellos acabamos comprendiéndonos. Es muy importante la comprensión mutua. Entre el hombre que puede hacerse comprender y el hombre que no puede hacerse comprender hay un abismo: uno se salvará, el otro no. También esto es fruto de la experiencia del Lager: la fundamental experiencia de la importancia de comprender y ser comprendido. A mi modo de ver, entre las primeras causas de tantos naufragios en el Campo, la lengua, el lenguaje encabezaba la lista.»
«Sí, todos sufrían substancialmente una profunda modificación de su personalidad, sobre todo una atenuación de la sensibilidad en lo relacionado con los recuerdos del hogar, la memoria familiar; todo eso pasaba a un segundo plano ante las necesidades imperiosas, el hambre, la necesidad de defenderse del frío, defenderse de los golpes, resistir a la fatiga. Todo ello propiciaba condiciones que pueden calificarse de animales, como las de bestias de carga.»

«…De este modo, desnudos y con la ficha de la mano, esperábamos a que la comisión llegara a nuestra barraca…Aquí, delante de las dos puertas, está el árbitro de nuestro destino, que es un suboficial de la SS. Tiene a la derecha al Blockältester, a la izquierda al furriel de la barraca. Cada uno de nosotros, saliendo desnudos del Tagesraum al frío aire de octubre, debe dar corriendo los pocos pasos que hay entre las puertas delante de los tres, entregar la ficha al SS y entrar por la puerta del dormitorio. El SS, en la fracción de segundo entre las dos pasadas sucesivas, con una mirada de frente y de espaldas, decide la suerte de cada uno y entrega a su vez la ficha al hombre que está a su derecha o al hombre que está a su izquierda, y esto es la vida o la muerte de cada uno de nosotros. En tres o cuatro minutos, una barraca de doscientos hombres está terminada y, durante la tarde, el campo entero de doce mil hombres.»Primo Levi

Pepe Fuentes ·