…Tiempo, tiempo y tiempo; siempre lo mismo. La fotografía de ayer: pepe fuentes, hace treinta y dos años y medio. La de hoy: el mismo tipo, solo aparentemente igual y diferente al mismo tiempo treinta y dos años después. En este trivial, pero insondable juego estoy ahora en mi cuarto oscuro. A los –ochenta y cuatro-, añadiré veintiocho más, en otro lugar de mi casa, catorce mías y las mismas de Naty. Abarcarán intervalos de tiempo que en mi caso cubrirán un espacio de treinta y cinco años y en el de Naty veinticinco. Será una autobiografía sin argumentos narrativos, sin retóricas esquivas y engañosas; solo piel y carne; también miradas (todas las fotografías tendrán ojos: creo que no se puede hablar de retratos si faltan los ojos del retratado, ojos que miren y vean, y, sobre todo, que digan). Sí, eso estoy haciendo en estos días, porque ya es tiempo de contar lo que ha sucedido…
3 ENERO 2015
© 2014 pepe fuentes