CUARTO OSCURO SÍ, CUARTO OSCURO NO I. Se podría decir que estoy inmerso en una jodida crisis, pero no, no quiero hablar de ello, porque casi no me importa, o sí, pero al fin y al cabo no deja de ser una puerilidad. En mi inmediata y no escrita hoja de ruta, tengo anotado encerrarme en el laboratorio unos meses para positivar, cosa que no hago desde hace casi tres años. Puede que me apetezca o no, no lo sé. Pero creo que tengo que probar. Una de las razones de que fotógrafos antiguos, como yo, hayamos decaído y nuestras supuestas obras se hayan diluido en la nada o sencillamente se hayan truncado, es que nuestros ilusionados momentos de los inicios los vivimos con un determinado y artesano modo de hacer, es decir, la fotografía pensada y ejecutada en la penumbra del laboratorio, no había otro modo. Y ahora, desde hace bastantes años ya, eso no es preciso, ni siquiera aconsejable desde el punto de vista de ahorro de energías y costes. Pero claro, el precio a pagar por tanta eficacia y ahorro ha sido altísimo, se ha llevado por delante la ilusión y el misterio, el lenguaje se ha banalizado hasta niveles insostenibles…
9 NOVIEMBRE 2017
© 2008 pepe fuentes