2 ENERO 2019

© 2015 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2015
Localizacion
Berlín (Alemania)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD DELTA 3200 (6400)
Soporte de copias
ILFORD MULTIGRADO BARITADO
Viraje
SELENIO
Tamaño
18 x 22,7 cm
Fecha de diario
2019-01-02
Referencia
2392

DIGRESIÓN UNA. Das schweigende Klassenzimmer (The Silent Revolution) Alemania (2018)- Guion (libro: Dietrich Garstka) y dirección: Lars Kraume. Intérpretes: Jonas Dassler, Judith Engel, Tom Gramenz, Michael Gwisdek, Max Hopp, Rolf Kanies, Burghart Klaubner, Lena Klenke, Daniel Krauss. Años cincuenta en Berlín oriental. Aún no se había construido el maldito muro. Bajo control, los berlineses-soviéticos todavía podían pasar al lado occidental. A unos estudiantes a punto de finalizar el bachillerato, espontáneamente y a partir del movimiento de liberación de los húngaros, se les ocurre provocar una leve protesta de silencio que enmascaran con una motivación futbolística. Pero no, ni eso es posible, todo el aparato represor comunista cae sobre ellos furiosamente. Los aplasta. Pocas bromas cabían con esos monstruos de manipulación y represión. Los comunistas siempre han sido así, en todos lados y a lo largo de sus cien años de historia. Esperemos que la pesadilla no duré mucho más en todos los lugares que todavía habitan (por cierto, aquí, un considerable sector de la población anhela ese ignorante despotismo). Película perfectamente ambientada, dirigida e interpretada. El reto para una historia así es que resulte verosímil y el aliento represivo lo sientas en la nuca como una amenaza posible y horrorosa. Justamente la que sintieron esos chicos y se extendió en ese entonces país por más de cuarenta años. La narración fluye con naturalidad y el posible mundo adolescente de esa época está contado con acierto, sin estridencias. Hay un lógico componente sentimental y romántico, o más bien melodramático, que podría resultar molesto; sin embargo, Kraume lo reviste de unos tintes épicos que equilibran la historia hasta llevarla a un sentido homenaje hacia unas actitudes juveniles heroicas y creíbles. Al parecer, la historia está basada en hechos reales: los chicos tomaron una decisión arriesgada y valiente que les permitió librarse de vivir cuarenta años bajo una siniestra opresión. Película viva, entrañable, emocionante, alentadora.

Pepe Fuentes ·