26 FEBRERO 2019

© 2018 pepe fuentes
Autor
pepe fuentes
Año
2018
Localizacion
Toledo, (España)
Soporte de imagen
-120 MM- ILFORD PAN F 50
Fecha de diario
2019-02-26
Referencia
8683

DIGRESIÓN DIEZ. La muerte del Comendador 2 (libro 1). Haruki Murakami (2017). Traducción: Fernando Cordobés y Yoko Ogihara. Tusquets Editores. Ebook (2018). …A propósito de mi fascinación por Murakami, de la que hablé ayer, y en lo que se refiere a este libro, diré que me ha parecido mágico, no solo porque la historia que cuenta te coloca en una perspectiva desde donde puedes atisbar otros mundos, fantásticos pero probables, sino porque, además, en su manera de contar a sus criaturas te los acerca hasta tenerlos al alcance de la mano. Los personajes: el protagonista, un pintor descreído de su propio talento; el interesante y enigmático vecino, Menshiki, que vive enfrente, con un valle de por medio; el comendador, sabio, mágico e insólito personaje de pura e insólita ficción; la amante del pintor, inteligente y sensual; Marie, la supuesta hija adolescente de Menshiki, enigmática e insondable; y algunos otros secundarios, todos ellos dignos de la mayor atención y empatía. Lo que hacen, lo que sienten, lo que intuyen, lo que sueñan, lo que desean, con lo que gozan, lo que leen, la música que escuchan hace que su estilosa galería humana resulte tremendamente atractiva. Viven en un mundo bello y gozoso donde, aparentemente, no existe el dolor. Quizá, ese esteticismo, sea una de las inimitables señas de identidad de su estilo: desplegar, desde la más brillante e imaginativa fantasía, el acceso a otros mundos a los que nuestra prosaica y convencional imaginación no alcanza. “El conocimiento no siempre enriquece y la objetividad no siempre es mejor que la subjetividad. De igual modo, la realidad no siempre apaga la ilusión”. Haruki Murakami. Esta primera parte está traspasada, de principio a fin, por una reflexión sobre el hecho creativo a través del pintor de retratos naturalistas que evoluciona hacia conceptos abstracto-expresionistas, o tal vez impresionistas. O, probablemente, enigmáticos “Era un momento que siempre me había gustado: el momento en que lo que es real y lo que no lo es se confunden”

Pepe Fuentes ·